Difícil pero no imposible, el reto de un ser humano excepcional para enseñarle al mundo a través del deporte que todo se puede con esfuerzo
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El próximo 3 de septiembre, miércoles para más señas, el azudense José Carlos de la Cruz Valdenebro iniciará el último capítulo de una aventura que le llevará a recorrer nuestra provincia en tan sólo cuatro días, encadenando sendas carreras de ultrafondo. Más de seis maratones en cuatro días, un reto que pondrá a prueba su cuerpo y su mente y con el que pretende homenajear al alcarreño Francisco Aritmendi, que ganó el Cross de las Naciones en marzo de 1964, disputado aquel año en el hipódromo de Lasarte, en San Sebastián.
"No somos familia, le conocí cuando me puse en contacto con él" aclara José Carlos, quien explica que la idea surgió a la sombra de los cincuenta años de la gesta del corredor guadalajareño, hito que coincide con el cincuenta centenario de su empresa, Saint Gobain, que recogió el guante y le ha apoyado en todo. "Llevaba tiempo participando en carreras populares y quería ir más allá, así que encontré esta motivación".
A pesar de ser un héroe prácticamente desconocido, confiesa que no le ha faltado ayuda de sus patrocinadores, "desde el primer día me han apoyado, colaborando para el tratamiento con los fisios, la suplementación, la equipación y esos asuntos que necesitaré durante la carrera". Los municipios donde terminan las etapas, por su parte, se encargarán del alojamiento y de las cenas. "Lo cierto es que no pensaba que esto iba a adquirir estas dimensiones e iba conseguir estar ayudas".
No ha faltado la colaboración popular gracias a unas pulseras a disposición del público que le sirven para costear la preparación previa y los tratamientos que ha necesitado seguir. Eso sí, lo más importante es el mensaje que quiere transmitir a la gente y que viene impreso en las pulseras: Difícil, pero no imposible. "Quiero hacer ver a la gente que, con esfuerzo, todo se puede conseguir".
Precisamente, José Carlos recuerda con emoción como, durante una charla motivadora en el Ayuntamiento de Chiloeches, conoció a una persona en una situación muy complicada por culpa de una enfermedad con la que estableció un pacto de motivación mutua. "Hay que alimentarse de los sueños, nada es imposible".
Su vinculación con Villanueva viene del deporte, pero de las dos ruedas, al que siempre ha estado muy ligado. Profesor de spinning, forma parte del Club MTB de Villanueva de la Torre, presidido por la concejal de Deportes, Marta Sanz, con la que también ha coincidido en alguna cita del Villanueva FitRun, la iniciativa gratuita para practicar deporte promovida por el Ayuntamiento de Villanueva de la Torre.
Ahora que se acercan los últimos días, la preparación mental comienza a surtir su efecto para superar la presión. "Es un reto muy físico, pero también un entrenamiento muy psicológico". Francisco Aritmendi le ha ofrecido su apoyo y sus consejos, "me dijo que el reto le parecía una auténtica machada y que yo tenía que ser el protagonista, aunque fuera él el homenajeado".
De cara al futuro más inmediato no se plantea más retos, pero sí le gustaría que el reto Ultra Alcarria calase y se convirtiese en una prueba periódica con el apoyo de instituciones como la Diputación Provincial. "Corriendo se marca el camino". De momento, tendrá suficiente con recorrer los más de 266 kilómetros de la vuelta a Guadalajara en cuatro días.
Quien quiera, puede seguir su entrenamiento y los últimos días de cara al reto a través de su perfil en Facebook, donde el atleta va dando buena cuenta de los días que le quedan para asumir la machada. ¡Todo nuestro apoyo desde el Ayuntamiento de Villanueva de la Torre!